Un hombre que iba de viaje llego a un hotel para descansar uns días, fue a la recepción para registrarse y la
señora le dio la llave de la habitación 17.
De
camino a ella vió una
habitación sin número y le pregunto a la señora que había ahí dentro,
ella simplemnte le dijo que no debía entrar, ni ver dentro por la
cerradura de la puerta.
El hombre se fue a
acostar pero no resistió la tentación, a la mañana siguiente fue a ver aquella habitación sin número y
entonces miro por la cerradura con curiosidad, únicamente vió una habitación común y corriente como
cualquier otra, sin embargo estaba vacia por completo.
Excepto que, en una esquina había una mujer arrodillada con
la piel totalmente blanca y con los ojos cerrados, se notaba triste e icluso parecia que lloraba, el iba a abrir la
puerta pero al final se arrepintió y se fue.
Pasaron
una horas más y pudo no resistió la curiosidad, asi que fue haber otra
vez por la cerradura de la puerta, pero esta vez solo vio rojo del otro
lado, creyendo
que la mujer lo vio y que había tapado la cerradura con con algo rojo
fue a hablar con la
señora.
Al escuchar lo que le comento el hombre suspiro y dijo: ”Pues como ya vió por la cerradura tendré
que contarle, en esa habitación un hombre mató a su mujer y el espíritu
de ella ronda adentro de la habitación, la particularidad de esa mujer
es que su piel es totalmente blanca y solo resaltan sus ojos de color
rojo"...
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